La actual directiva de la Central Unitaria de Trabajadores criticó la renuncia de Arturo Martínez y sentenció que está frustrado por no poder ganar las elecciones internas de la manera irregular en que lo buscó.
En el Colegio de los Profesores, plantearon que todos los reclamos y emplazamientos de Martínez no quitan el hecho que él es uno de los principales responsables de la crisis de la multisindical.
El 12 de septiembre del año pasado y con 280 mil votos, Arturo Martínez se auto proclamaba ganador en las elecciones internas de la Central Unitaria de Trabajadores.
Esa misma semana y con un acuerdo entre cuatro paredes, sus contendores decidieron sumar delegados, quitándole el triunfo a quien presidió la multisindical por 12 años.
Acusando irregularidades y que serían una lista de transición que no pasaría del 2 mil 16, la comunista Bárbara Figueroa y el falangista Nolberto Díaz asumían el poder mientras Martínez, resignado, se quedaba con una vicepresidencia.
Meses después y con críticas de gremios como el Colegio de Profesores, el dirigente socialista sentenció que renunciará a la multisindical. En conversación con Radio Bío Bío, Martínez aseguró que todo se transformó en una mafia y que sin voto universal, no existe representatividad.
El reclamo del voto universal – que no existe en la CUT desde su fundación – también fue una carta de lucha del magisterio, que congeló su participación en la multisindical.
El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, reprochó a Martínez, a quien acusó de ser uno de los principales responsables de la falta de democracia en la multisindical.
El secretario general de la CUT, Nolberto Díaz, también se sumó a las críticas por los dichos de Martínez, y sentenció que el socialista hizo todo lo posible para llevarse el triunfo de manera irregular.
La decisión del último Congreso de la Central Unitaria de Trabajadores es realizar nuevas elecciones para el mes de abril. Según las primeras estimaciones manejadas en la directiva, estas serían realizadas el jueves 20 de dicho mes. Eso sí, no habrá cambio de sistema de votación.
