Durante la mañana se realizó una mesa de trabajo en el ministerio de Justicia para dar tareas y análisis sobre seguridad en los tribunales.

Fue el lunes cuando el reo Leonardo Asagra de 25 años le quitó el arma de servicio a un gendarme luego de herirlo en el rostro y amenazó al magistrado Sergio Hernández, usándolo de escudo para escapar.

Este hecho empujó a crear la instancia de coordinación que pretende realizar un trabajo a largo plazo.

El director (s) de Gendarmería, Maurice Grimalt aseguró que en el momento se encontraba el personal adecuado y señaló que las fugas anteriores se han debido a “fallas humanas“.

A pesar de que hay antecedentes de fugas anteriores en San Bernardo y otros lugares del país, el ministro (s) de Justicia Nicolás Mena insistió en que se trata de un hecho excepcional que se intenta extrapolar.

En tanto la presidenta de la Corte de Apelaciones de Santiago, María Teresa Díaz, reconoció que existe temor por la seguridad, pero en aspectos que tienen que ver con cosas cotidianas.

La próxima reunión de la mesa está fijada para marzo donde se invitará a la Asociación de Magistrados y entre las tareas asignadas está la creación de un catastro de la situación de seguridad en los distintos tribunales de justicia.