El sindicato de trabajadores de Minera Escondida rechazó las denuncias de la empresa respecto de actos de violencia durante la jornada de huelga de este domingo. Los funcionarios, que hoy cumplen el quinto día de paralización, aseguraron que se trata de maniobras distractivas.
Las acusaciones de la minera aseguran que 300 encapuchados amenazaron y obligaron a contratistas a abandonar sus faena y además impidieron el ingreso de otros funcionarios a las obras.
“Los mismos encapuchados activaron los sistemas de alarma de incendio en los pabellones, generando destrozos y hurtos de especies (…) un grupo menor se dirigió a la garita de acceso principal P1, cortando el suministro eléctrico, dejando fuera de servicio las cámaras de vigilancia y sistema de verificación de ingreso, obligando a personal de Prosegur a bajar de faena”, era parte de las acusaciones de la minera.
El portavoz del Sindicato N°1 de Escondida, Carlos Allendes, reconoció que hubo una manifestación de trabajadores y que sí ingresaron a la faena, pero que fue de manera “totalmente pacífica”. Junto a ello, el dirigente acusó al vicepresidente de Asuntos Corporativos de la empresa, Patricio Vilaplana, de querer “distraer” con este tipo de acusaciones.
Denuncias que tensionan aún más la posición entre trabajadores y la empresa en el quinto día de paralización en la región de Antofagasta. A raíz de los incidentes, Vilaplana anunció que la empresa ejercerá acciones legales por los hechos registrados la tarde de este domingo.
Paralelamente, el cobre registró un alza de 4% en la Bolsa de Metales de Londres y se cotizó en dos dólares con 77 centavos la libra, su mayor valor desde mayo de 2015. El metal rojo avanza en la senda de las apuestas del mercado por llegar a los tres dólares la libra.
