Una nueva arista se abrió en el caso de la muerte de la pequeña Lissette Villa, de 11 años, quien perdió la vida en un centro dependiente del Servicio Nacional de Menores (Sename) en abril de 2016.

Lo anterior, luego que el papá de la menor presentara una querella en contra del fiscal que lleva el caso, el persecutor regional de Los Lagos, Marcos Emilfork, por no tomar en cuenta la autopsia del Servicio Médico Legal.

La querella presentada el 23 de diciembre pasado, acusa al fiscal Emilfork de obstrucción a la justicia mediante el ocultamiento de pericias, y pide su remoción del caso junto a la fiscal adjunta Erika Vargas.

No obstante, y debido a que la acción legal fue presentada después de la denuncia inicial del mediático caso, es imposible la remoción de ambos funcionarios del Ministerio Público por no existir una inhabilidad.

Pero los querellantes no se quedaron con las manos vacías, debido a que el fiscal nacional Jorge Abbott ordenó al fiscal regional metropolitano Oriente, Manuel Guerra, iniciar una investigación paralela para determinar si efectivamente hubo un ocultamiento de información pericial.

Si bien el fiscal Guerra ya fue notificado, aún está a la espera de recibir los antecedentes de la carpeta investigativa, según publica El Mostrador. Aunque, desde el Ministerio Público consideran que la imputación contra Emilfork es “débil”.

El cambio polémico

Recordemos que el próximo 1 de marzo serán formalizadas las cuidadoras del Servicio Nacional de Menores como autoras de apremios ilegítimos y tormentos con resultado de muerte.

No obstante, tanto los querellantes, como el diputado y miembro de la Comisión Investigadora del Sename, René Saffirio, aseguran que ignoran por qué se sigue hablando de tortura y asfixia, cuando el primer informe del Servicio Médico Legal señala claramente que la causa de la muerte de la menor fue una arritmia asociada al uso de fármacos, específicamente sertralina y litio.

El detalle, es que -según los querellantes- la investigación está basada en el último informe del Servicio Médico Legal, la muerte se produjo por “asfixia por sofocación producto de compresión mecánica externa”.

Lo polémico, según el diputado Saffirio, es que si se establece que la causa de la muerte fue tortura y asfixia, la responsabilidad penal recae sólo en las trabajadoras de trato directo.

“Pero si se establece que la causa de la muerte fue la arritmia asociada al uso de fármacos, entonces las responsabilidades están más arriba. Aquí hay médicos que recetaron la sentralina y el litio”, precisó a Radio Bío Bío.

Lee también:
Saffirio insiste en que causa de muerte de Lissette es una arritmia por el uso de fármacos

Por lo mismo, la querella busca que se le tome declaración tanto al fiscal Emilfork, junto a otros peritos que elaboraron informes después de la autopsia en el SML, y sin haber examinado el cuerpo de la pequeña Lissette, que atribuyó el deceso al uso de fármacos.

Entre los requeridos figura la fiscal adjunta Erika Vargas, el tanatólogo René López, además de las médicas Pía Smok, de la PDI, y Pamela Bórquez, del SML.

Este artículo describe un proceso judicial en curso
Existe la posibilidad de que los cargos sean desestimados al finalizar la investigación, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados como culpables hasta que la Justicia dicte sentencia en su contra.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)
Violencia contra la mujer
Si eres víctima o testigo de violencia contra la mujer, denuncia al 149 de Carabineros, recibe orientación llamando al número corto 1455 del Sernameg.