Estudiantes de la Confech regalaron pasas a la ministra de Educación con un llamado a no olvidar el compromiso de que las universidades no deben lucrar con fondos públicos.
Con dos bolsas llenas de pasas llegaron esta mañana los estudiantes universitarios hasta el Ministerio de Educación, para entregar de manera simbólica a Adriana Delpiano y al gobierno, emplazándolo a no olvidar sus promesas.
Los compromisos están relacionados con la gratuidad universal, que fue aprobada en el Congreso hace un par de días, en el marco de la discusión de presupuesto y con un trato entre el Ejecutivo y la oposición, y que dependerá de la glosa presupuestaria en educación que se discuta cada año en el parlamento.
Además protestaron por las Becas Bicentenario, que podrán ser entregadas también en universidades no estatales, lo que a juicio de los universitarios favorece el lucro, dijo Patricio Medina, presidente de la Federación de estudiantes de la Usach.
A fin de contribuir a las indicaciones al proyecto de ley de reforma educacional, es que los universitarios pidieron al Ejecutivo una mesa de diálogo efectiva, con una serie de propuestas.
Un llamado similar hizo Ennio Vivaldi, rector de la universidad de Chile, quien afirmó que durante todo el proceso de cambios en materia educacional que ha hecho el Gobierno, debe generar confianzas con diálogo.
A fin de evitar que la oposición concurriera al Tribunal Constitucional, el Gobierno llegó a un acuerdo para extender los beneficios a estudiantes de planteles privados que no forman parte del Cruch.
Esta decisión fue criticada por el propio Consejo de Rectores, además de parlamentarios oficialistas e independientes.
