Los Frentes Sindicales de los partidos de la Nueva Mayoría criticaron profundamente la declaración de seis de sus presidentes en la que reprocharon al PC por rechazar el 3,2% de reajuste propuesto por el Ejecutivo para el sector público.
A través de una declaración pública, indicaron que les parece “profundamente inadecuado” que el fracaso en la negociación se asuma como como un tema de “lealtades partidarias” y se desconozcan las razones que llevaron a rechazar la primera propuesta y luego, el veto aditivo.
En ese sentido, agregaron que los esfuerzos de los presidentes de partido deberían estar centrados en retomar el diálogo entre el Ejecutivo y los trabajadores, “más que entrar en la pequeña disputa por culpables y recriminaciones”.
Otro de los fuertemente criticados fue el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a quien acusaron de tener una actitud terca, además de señalar que “no ha estado a la altura de ninguno de los debates legislativos durante su período“.
Además, calificaron de incomprensible e impresentable que un Gobierno que se declara de “centro izquierda y progresista, el “trato vejatorio del que fueron objeto destacados dirigentes sindicales en el Congreso” durante su desalojo de las tribunas.
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Finalmente, rechazaron los cuestionamientos de los presidentes de los partidos de la NM al derecho a paralizar y a huelga de los trabajadores como herramienta de presión para lograr sus demandas, y llamaron a las directivas a trabajar para terminar de buena manera este gobierno y proyectar el siguiente periodo “con una verdadera base de fuerza social”.
