Con 83 votos a favor, 7 en contra y 22 abstenciones, el proyecto que busca generar la elección popular de los intendentes – quienes pasarán a llamarse gobernadores regionales – fue aprobado en la Cámara de Diputados y entrará a su tercer trámite legislativo.

La presidenta de la comisión de regionalización, Daniela Cicardini, espera que el proyecto ya esté vigente para las elecciones del 2017, pero dijo que aún falta mucho por discutir.

Un proyecto cuestionado porque no incluye las atribuciones a la nueva figura que abarcaría – en parte – el rol de la máxima autoridad en las distintas regiones, que van en una iniciativa paralela. Por eso, el diputado gremialista, Ignacio Urrutia, aseguró que solamente busca engañar a la gente.

El proyecto que fue aprobado en la Cámara asegura que el candidato que tenga la mayoría y que obtenga el 40 por ciento de los votos sería electo por cuatro años, pudiendo ser reelecto por un periodo. En tanto, se crearán las figuras de secretario regional y secretario provincial, quienes representarán al presidente y ayudarán a la coordinación con los ministerios.

El RN, Miguel Becker, pidió al Senado cumplir con los plazos para que el proyecto sea votado el 2017.

El jefe de bancada de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, emplazó al parlamento, especialmente a los senadores del PPD, a no votar con la calculadora en la mano y velar por el bien de las regiones.

Un proyecto que estaba dentro del programa de gobierno y que -pese al pesimismo de varios parlamentarios- el ejecutivo espera que esté listo para los comicios del 2017.