Tal como ha ocurrido desde hace un mes y medio, nuevamente algunos presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría reiteraron la necesidad de que la presidenta Michelle Bachelet ejecute un cambio de ministros que vaya de la mano de un reimpulso de la agenda gubernamental.

Según explicaron en el oficialismo, este cambio de secretarios de Estado es necesario en estos tiempos, cuando se está discutiendo el presupuesto de la Nación para 2017, ya que se parte con el envío del proyecto al Congreso y serán los ministros quienes deberán ir a defender cada una de sus partidas. Por ello, cursar este cambio sería adecuado.

El presidente del PPD, Gonzalo Navarrete, urgió al Gobierno para que escuche finalmente la solicitud del oficialismo.

“Creo que todas estas semanas se lo hemos indicado, creo que la toma de decisiones en los distintos ámbitos de ejecución presupuestaria, de readecuaciones y lo que tiene que ver con crecimiento económico requieren que esto se resuelva y espero que sea a la brevedad posible. Efectivamente no hubo una respuesta concreta hoy, pero creo que todo el mundo le dijo que ya estábamos en el tiempo límite y espero que eso se resuelva a la brevedad posible”, dijo Navarrete.

En la misma línea el timonel del Partido Radical, Ernesto Velasco, fue más explícito en su solicitud de pedir un cambio de ministro: “Estamos roncos, tengo la garganta media ronca por lo mismo. El problema es que no hay repertorio para lo mismo. Para ser franco, por respeto al país, todos hemos hablado de que el país requiere un ajuste de gabinete, que requiere una priorización, tener claridad en lo que es un nuevo trato y, por lo tanto el Gobierno verá cuándo lo estima. Ahora, yo creo que más allá de los nombres, en lo que tiene que ponerse el acento es en un diseño”.

El presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, normalmente no suele pronunciarse sobre las solicitudes de ajustes al equipo ministerial. Sin embargo, dijo que ya es tarde como para estar ejecutando cambios de gabinete.

“Ustedes saben que yo nunca ando pidiendo cambios de gabinete no es porque no los quiera pero creo que eso le corresponde a la presidenta. Y si ya no lo hizo, efectivamente queda poco tiempo, pero una nunca puede decir ‘las cosas no van a suceder’. Puede que sucedan”.

El vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, indicó que al menos en el seno de la reunión del comité tradicional de los lunes, los partidos de la Nueva Mayoría no habían pedido un cambio de ministros.

“No fue un planteamiento que se hiciera formalmente en la reunión, así que no le puedo decir qué les respondimos porque no hubo una conversación formal sobre esto. Yo lo que he dicho siempre es lo mismo que he dicho pública y privadamente: esas son competencias exclusivas de la presidenta de la República. Cuando ella estime oportuno y necesario plantearse un cambio de gabinete lo va a hacer y punto”.

El ministro del Interior, Mario Fernández, también fue consultado sobre el tema, ya que había expectativa hoy debido a que no figuraban para este lunes mayores agendas públicas de la presidenta Bachelet durante gran parte de la jornada.

De todos modos, el secretario de Estado respondió en la misma línea de las facultades de la mandataria para determinar cualquier tipo de ajuste.

“Usted me está considerando una especie de vidente. Yo he dicho en reiteradas oportunidades, he repetido lo que la Constitución señala; las designaciones de los ministros es una atribución exclusiva de la presidenta de la República, y ella obviamente, según los criterios que maneje, puede tomar este tipo de decisiones en cualquier minuto”.

De todas formas el comité político tradicional de los lunes, donde estuvo al inicio el ministro Fernández, estuvo centrada en los aspectos y tópicos que tendrá el presupuesto de la Nación para 2017.

El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, aseguró que Salud y Educación serán el centro donde se depositará el crecimiento del presupuesto para el próximo año, mientras otra parte va a ir a Seguridad.

Esos serán los tres ejes que tendrá el erario, y además en la reunión se hizo un llamado a los timoneles a entender de que hay menos dinero en las arcas fiscales, por lo que existirán
mayores restricciones para otro tipo de iniciativas.