Tras ser aludida por el líder de la Conapyme, Rafael Cumsille, la presidenta Michelle Bachelet defendió a sus asesores de las críticas y desestimó la responsabilidad de ellos en los resultados de la encuesta CEP.

“Hay una cosa que no es así Rafael: ya no están los tiempos como aquellos que usted mencionó. Nadie va a decirme mentiras, le puedo asegurar. La gente dice la verdad. Ya no están los tiempos para que la gente diga palabras bonitas. La gente que va a reunirse conmigo va siempre a decirme la verdad porque además es lo que yo espero de las personas”, comenzó la mandataria en Enape.

Agregó que es lo mismo que espera de los ministros y de los subsecretarios “porque para mí la palabra lealtad significa decir la verdad siempre y no pasarse películas ni cuentos de colores. Y la verdad es que yo soy súper realista y tengo muy claras como son las cosas”, explicó.

“Es cierto Rafael que a veces uno no puede saberlo todo. Nadie puede saber todo lo que pasa en cada rincón del país porque en los tiempos que usted contaba, ellos decían ‘no hay hoja que se mueva sin que yo lo sepa’, pero la verdad es que en una democracia hay muchas hojas que se mueven y uno no tiene idea“, río la presidenta.

Bachelet enfatizó que “hay algo que vamos a seguir haciendo siempre nosotros hasta el final del Gobierno y es asegurar que haya espacios de diálogo, espacio de encuentro, espacios donde cada uno pueda decir cuál es su situación, dónde le aprieta el zapato de manera que podamos mirar cómo podemos buscar las soluciones más adecuadas”.

Por otra parte, la mandataria dijo conocer el “tremendo valor de las empresas”. “Es muy importante reconocer esto en momentos en que nuestra economía pasa por dificultades“, aseguró.