Usualmente aplicamos perfume en zonas claves de nuestro cuerpo como las muñecas y el cuello para conservar la fragancia lo más que podamos, sin embargo, queremos contarte que hay otra parte en donde deberíamos aplicar nuestro perfume preferido.

Según Huffington Post, deberíamos aplicar alguna fragancia en nuestro obligo, ya que al igual que las muñecas y el cuello, son “puntos de pulso”, lugares del cuerpo en donde se concentra gran parte del calor corporal lo cual intensifica el aroma.

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El obligo en particular, es visto como un depósito para el olor y el calor del cuerpo, por lo que si aplicamos perfume en esa zona, será más probable que se irradie con mayor intensidad la fragancia.

“Pongo pequeñas gotas en mis dedos y pongo un poco debajo de los brazos y en mi ombligo” dijo la actriz Liv Tyler en una entrevista para el sitio Into The Gloss. “Mi padre me enseñó que, si lo pones donde su cuerpo se calienta, el olor se queda contigo” agregó.

Otros lugares del cuerpo en donde es aconsejable aplicar perfume son en el interior de los codos y detrás de las rodillas ya que en esas zonas también se genera gran cantidad de calor.