Es bastante común ver gel de ducha exfoliante en los hogares, ya que gracias a este producto las personas limpian y tonifican su piel, eliminando las células muertas.
Sin embargo, un reciente estudio sostiene que su uso podría tener insospechadas consecuencias en nuestra salud.
Frank Kelly, profesor y experto en salud medioambiental del King´s College de Londres está desarrollando un estudio para verificar si las pequeñas partículas plásticas en el aire podría ser un riesgo para las personas.
Estas microesferas de plástico son agregadas a productos de limpieza, como los gel exfoliantes, y de acuerdo al especialista, unas 100 mil de estos pequeños compuestos pueden ser eliminados por el desagüe en una sola ducha.
Kelly recalca que el problema es que gran parte de este producto llega hasta los océanos, y debido a que son demasiado pequeños se hace muy difícil ser detectados de forma rutinaria por las plantas de tratamiento de aguas.
Advierte que ha notado un incremento de este material en el medioambiente, por lo que le preocupa el hecho de que podamos estar consumiéndola a través de los productos marinos como pescados y moluscos.
De hecho, el profesor sostiene que cualquier microplástico atrapado en las plantas de tratamiento de aguas residuales podría transportarse además a través del aire.
“Existe una posibilidad real de que algunas de estas micropartículas puedan ser arrastradas a través del aire e ingresen a nuestro organismo mediante la respiración”, aseveró el experto, según consignó el periódico británico The Independent.
“Si ingresan a nuestro cuerpo a través de la respiración, podrían eventualmente ingresar químicos a nuestros pulmones”, comentó, comparándolo con las emisiones de los vehículos.
Este microplástico podría provocar problemas en la respiración, tal como sucede con la polución tradicional en el aire, sostiene el profesional.
María Neira, directora del departamento de Salud Pública, Medio Ambiente y Determinantes Sociales de la Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), reveló el pasado mes un informe con un pronóstico devastador.
Según indica la experta, los altos índices de contaminación en el aire provocan más de 3,5 millones de muertes prematuras cada año: tan solo por respirar en una ciudad con polución.
El estudio, que incluyó a 3000 ciudades diferentes en 103 países, indica que en promedio la contaminación en el aire creció en un 8%.
“Respiramos aire que nos va a causar no solo enfermedades respiratorias, como pensábamos antes, sino también infarto cerebral y enfermedades cardiovasculares”, señala María en entrevista con el portal de noticias español El País.
