Natalie Dormer, actriz de 34 años que interpretó a Margaery Tyrell en la serie de HBO Game of Thrones, confesó que durante su carrera ha sufrido un tipo de sexismo “innato (…) que es el más peligroso de todos: la gente no se da cuenta de que está ahí, y terminamos aceptándolo disimuladamente porque es parte de nuestra cultura”.

Esto lo confesó en entrevista con la revista estadounidense Elle, donde añadió que “personalmente nunca he sufrido sexismo explícito, abierto, confrontacional. Pero sí, estoy segura de que (el sexismo) ha estado presente durante mi carrera. Estoy segura de que eso le ocurre a la mayoría de las actrices”.

Respecto a las críticas que han recibido actrices que se declaran feministas, Dormer recalcó que “todos se están concentrando en el aspecto equivocado (…) Ninguno de nosotros quiere que niñas pequeñas sean forzadas a casarse tempranamente antes de cumplir los 12 años. Nadie quiere mutilación genital, nadie quiere que las violaciones se utilicen como una táctica en guerra. Así que creo que si dejamos de jugar a nivel superficial y nos concentramos en las mujeres que están pasando por crisis reales alrededor del mundo, sería lo mejor, si todos nos uniéramos para enfrentar las cosas importantes y dejáramos de distraernos con lo superficial”.

Por otra parte, la actriz confesó que lo que la motivó a escribir el guión de su nueva película In Darkness, el que realizó junto a Emily Ratajkowski, fue que “sentía frustración respecto a la calidad de los roles para mujeres que estaba leyendo en guiones”.

“Comencé a escribirlo hace 6 años y medio, así que el paisaje ha cambiado un montón en este tiempo, y obviamente ha habido mucho más diálogo específicamente en los últimos dos años. Ha habido una especie de mini-revolución”, sostuvo.

Lo que más odió de Game of Thrones

En la entrevista, Natalie también se dio el tiempo de hablar de la serie Game of Thrones. En ese sentido, reveló que lo más odió durante su participación en la producción fueron “todos los pinches que debía poner en mi cabeza para la peluca. Habría hecho explotar a un detector de metales. ¿Y te ha pasado que hay veces en que tu cabeza te pica? Entonces lo que no extrañaré serán los pinches raspando mi cuero cabelludo. La peluca me la ponían como a las 5:30 o 6 de la mañana, y no me la podía sacar hasta las 7 de la tarde”.

Además, reconoció que lo que se llevó del set como recuerdo -que en realidad no se lo “robó”, sino que se lo regalaron los creadores de la serie- fue la corona de matrimonio Margaery Tyrell. “Así que ahora está sobre mi librero”, dijo.

Sobre la próxima temporada de Game of Thrones, aseguró que le gustaría que muriera Cersei.

“Cersei mató a muchos de nosotros en el último episodio y realmente se ha vuelto oscura. Incluso Jaime Lannister lo ha notado, así que no creo que Cersei Lannister dure mucho en el mundo de Westeros. Espero que no”, afirmó.