La industria de la belleza siempre procuró darle un aire de misterio, e incluso magia, a sus cremas, polvos y pociones, pero ahora tiene algo más en la manga: la alta tecnología.

El gigante francés de la cosmética L’Oreal abrió una “incubadora tecnológica” en la que trabajan dos docenas de personas en San Francisco y otros lugares usando datos y algoritmos para ganar los corazones y mentes de los consumidores.

Eso puede abarcar grandes combinaciones de datos para encontrar el correcto color de una pintura de uñas o crear parches que midan la absorción de radiación ultravioleta. También implica usar la tecnología para detectar nuevas tendencias en materia de belleza.

L’Oreal espera que los talentos de Silicon Valley la ayuden a mejorar sus productos y conectarse mejor con los clientes.

Guive Balooch, jefe de la incubadora de San Francisco, dice advertir cuánto puede la tecnología ayudar a mejorar los productos de belleza.

Una de las innovaciones ha resultado para la marca L’Oreal Lancome el desarrollo de una base de maquillaje personalizada conocida como “Le Teint Particulier”.

Ese sistema, ahora utilizado en algunas tiendas minoristas, escanea la piel de una persona y utiliza un algoritmo que desarrolla un producto basado en el tono de la piel. El sistema fue desarrollado por una “start up” de California que fue comprada por L’Oreal en 2014.

El equipo de L’Oreal también creó la aplicación Makeup Genius que utiliza realidad virtual para mostrarle a una persona desde su smartphone cómo le sientan diversos tipos de maquillajes. Esa aplicación ha sido bajada más de 20 millones de veces.

El gigante de la cosmética también trabajó con California Organova en “bioimpresión” para crear tejido humano tridimensional para testear cométicos y fármacos. Con PCH Lime Lab, una firma de diseño e ingeniería de San Francisco, proyectó unos parches que se adhieren a la piel y cambian de color con la exposición a los rayos solares.

Tecnología al pelo

El equipo de L’Oreal sueña con tener una aplicación Genius para el color del cabello que podría ayudar a uno de sus productos claves si se superan algunos desafíos técnicos.

“El color del pelo es muy complejo porque en promedio hay unos 100.000 cabellos en la cabez y se mueven todos en diferentes direcciones” dijo Balooch.

L’Oreal quiere seguir al tope de las tendencias y el análisis de datos tiene un papel fundamental, añadió.

“Por datos anónimos sabemos qué colores la gente está probando en todo el mundo, sabemos qué productos han usado y por cuánto tiempo hasta cambiarlo por otro”, aseguró.

Estar atento a las tendencias es también crítico para los esfuerzos de marketing.

L’Oreal trabaja con Google para ayudar a entender mejor las tendencias de la moda estudiando qué se busca en la web.

Eso permitiría a L’Oreal ubicar sus avisos en base a palabras clave, según su experto en estrategia digital Axel Adida.

Añadió que lo importante es “estar prontos para lo último que vaya surgiendo en la moda”.

“Lo que es fenomenal cuando trabajas con Google es que es una especie de perspicaz centro de belleza”, añadió.