Un miembro importante del Estado Islámico (EI) dirigió el intento de atentado contra un avión en Australia, informó este viernes la policía, que anunció que también desmanteló un plan de ataque con gas tóxico.

“La ayuda venía de un importante miembro del Estado Islámico“, dijo el subinspector de la Policía Federal australiana, Michael Phelan, que usó el término “comandante”.

Los sospechosos planeaban colocar un artefacto artesanal en un vuelo de Etihad Airways que salía de Sídney el pasado 15 de julio, pero la operación fue abortada antes de que pasaran el control de seguridad.

Dos hombres, Khaled Khayat, de 49 años, y Mahmud Khayat, de 32, fueron detenidos por haber preparado o planeado “un acto terrorista”. Otro individuo estaba siendo interrogado y un cuarto fue puesto en libertad sin ningún cargo contra él.

El comandante del EI envió los componentes mediante un servicio de cargo internacional y después los guió para que pudieran montar la bomba, denunció la policía.

“Con la ayuda de este comandante (del EI), los acusados armaron el artefacto explosivo y pensamos que el IED (artefactos explosivos improvisados) estaba operativo y tenía que ser colocado en este vuelo” de Etihad, precisó.

“Hay algunas conjeturas sobre por qué no siguieron adelante. No pasaron el control de seguridad”, añadió Phelan, que calificó el plan como “uno de los más sofisticados que se han intentado perpetrar en territorio australiano”.

Las autoridades barajan la hipótesis de que el plan fue descubierto porque el artefacto, que estaba camuflado para que pareciera una picadora de carne, era muy pesado para ser considerado equipaje de cabina.

La destinación del vuelo no fue revelada pero algunas informaciones indican que el avión tenía como itinerario Abu Dabi. Esta semana la compañía Etihad dijo que estaba trabajando con los investigadores del caso.

La policía no desveló tampoco la identidad del mando del EI involucrado, pero dijo que probablemente el vínculo se estableció por un familiar que también alcanzó un alto rango en la organización en Siria.

Phelan admitió asimismo que era preocupante que los componentes hubieran podido llegar a Australia por correo.

“Lo que sospechamos en este momento es que los componentes de la bomba artesanal partieron de Turquía. Confiamos en haber encontrado todos los componentes del dispositivo”, agregó.

Los contactos comenzaron en abril y según la policía la alta potencia de los explosivos hubiera causado “daños significativos”.

Seguridad reforzada

La policía también reveló que desbarató un segundo ataque con “un aparato químico de dispersión”, que estaba diseñado para esparcir sulfuro de hidrógeno, un plan que estaba fraguándose.

Este compuesto es altamente tóxico y muchas veces es fatal para las personas expuestas.

“No sólo detuvimos el aparato explosivo artesanal que se cree que iba a ir en un avión sino que también desbaratamos un dispositivo de dispersión química”, explicó el funcionario.

El segundo plan, desmantelado después de que el primer intento de ataque fallara, no necesariamente tenía como blanco un avión.

“Estamos considerando espacios cerrados concurridos (…) posiblemente el transporte público”, explicó el policía.

La seguridad fue reforzada en los vuelos internos y en los trayectos internacionales después de que el sábado cuatro personas fueron arrestadas.