Entre las bulliciosas calles del centro de Ciudad de México, arqueólogos extrajeron restos óseos donde -en la época de la colonia- operaba el hospital para indígenas más importante de América, informó este domingo el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Los expertos del INAH constataron el hallazgo en un pozo en el que la Comisión Federal de Electricidad realiza desde hace dos años la sustitución del cableado eléctrico y las exhumaciones de los restos fueron realizadas bajo la mirada de curiosos pasantes, indicó la institución en un comunicado.

Los huesos se encontraban donde se situaba el Hospital Real de San José de los Naturales, que durante la época colonial y buena parte del siglo XIX dio “identidad” a lo que fue el barrio de indios de San Juan Moyotlan, explicó.

La arqueóloga Belem Beltrán Alarcón, responsable de los trabajos de salvamento, informó que la antigüedad del material óseo corresponde a diferentes fases del funcionamiento de la institución hospitalaria, desde que se erigió en 1553 a petición de la orden franciscana, hasta 1822.

El recinto, también llamado Hospital de Indios, contaba con enfermerías, teatro, escuela, botica, patios, jardines, iglesia y cementerio. Atendía a los indígenas de la ciudad y también del Altiplano Central, de manera que llegó a ser el hospital de indios más importante de América, aseguró el INAH.

Los expertos calculan que los restos óseos corresponderían a unos 70 individuos y estiman que el área en que los hallaron corresponde a la de la fosa común del cementerio.

Para los arqueólogos Adrián Fuentes, Juan Carlos Bautista y Ana Karen Guerrero, quienes supervisan los trabajos, lo más interesante será el posterior análisis antropofísico de los restos, que permitirá conocer detalles del tipo de población que era atendida en el lugar y las causas de muerte, entre las que no se descartan la viruela y otras enfermedades infecciosas.

“La mayoría de los restos óseos son de individuos adultos masculinos, algunos de los cuales por el tamaño de los huesos largos y el volumen del cráneo, pudieran corresponder a población negra o mulata“, indicó el INAH.

El Hospital de Indios fue el primero donde se hicieron autopsias en México y fue clausurado una vez consumada la Independencia en 1810, pues se buscaba la abolición de las diferencias raciales.

En 1935, el hospital y su iglesia barroca anexa, dedicada a El Divino Salvador, fueron demolidos para ampliar la avenida San Juan de Letrán, hoy el concurrido Eje Central Lázaro Cárdenas.