Al menos 20 civiles murieron este jueves en Siria en bombardeos aéreos del régimen contra zonas controladas por grupos yihadistas y rebeldes en el norte del país, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSHR).

En otras partes de Siria, devastada desde 2011 por la guerra, los rebeldes dispararon cohetes contra la capital, Damasco, bastión del régimen de Bashar al Assad, donde siete personas murieron, según la agencia oficial de noticias Sana.

De acuerdo con información de la Agence France-Presse, los ataques se produjeron después de la muerte de tres niños por disparos de artillería del régimen contra el enclave rebelde del este de Guta, cerca de Damasco, según la OSDH.

Lee también: EEUU no descarta nueva acción militar sobre Siria tras acusaciones de ataque químico

Pero los hechos más violentos tuvieron lugar en el norte del país, en la provincia de Alepo y en la vecina Idlib donde el régimen, apoyado por su aliado ruso, lleva a cabo una ofensiva, precisó la ONG.

“Los bombardeos aéreos del régimen golpearon dos pueblos del sur de la provincia de Alepo, y mataron 15 civiles“, indicó a la AFP el director de la OSDH, Rami Abdel Rahman.

Los ataques afectaron regiones controladas por grupos rebeldes y la organización yihadista Hayat Tahrir al Cham, una facción vinculada a Al Qaida, según Rahman.

Los ataques aéreos del régimen en Idlib también mataron a cinco civiles en la localidad de Saraqeb, según OSDH, que dispone de una gran red de fuentes en este país en guerra.

Lee también: Turquía reanudó los bombardeos contra la milicia kurda en Siria

Con el apoyo de la aviación rusa, el régimen lanzó el 25 de diciembre una gran ofensiva para conquistar el sudeste de Idlib.

La guerra en Siria, que empezó en 2011 por la represión de manifestaciones pacíficas, se ha hecho más compleja con la implicación de países extranjeros y grupos yihadistas.

Ha dejado, hasta la fecha, más de 340.000 muertos y millones de desplazados y refugiados.