Un bombardeo de la coalición liderada por Estados Unidos causó este viernes decenas de muertos, incluidos 33 niños, entre las familias de combatientes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en una ciudad del este de Siria.

La coalición ha sometido los bastiones del EI en Irak y en Siria a intensos bombardeos desde que el grupo yihadista reivindicó la autoría del atentado que dejó 22 muertos y 75 heridos el lunes en Mánchester.

Según la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que cita a fuentes médicas y civiles, más de un centenar de familiares de yihadistas del EI murieron entre el jueves y el viernes en bombardeos de la coalición en Mayadin.

En esa ciudad cercana a la frontera con Irak, al menos 80 civiles, todos familiares de los yihadistas, murieron el viernes. Entre las víctimas mortales había 33 niños.

“Esas familias se habían refugiado en el edificio del Ayuntamiento de Mayadin”, una ciudad controlada desde 2014 por el EI, afirmó a la Agence France-Presse Rami Abdel Rahman, director del OSDH, una organización con sede en Reino Unido que dispone de una amplia red de informadores en Siria.

“Es el balance más importante de un bombardeo contra familias yihadistas en Siria”, según él.

El ataque de este viernes ocurrió horas después de que otro bombardeo de la coalición dejara 37 civiles muertos, en su mayoría familiares de yihadistas, en la misma ciudad, añadió el OSDH.

Mayadin acogió en los últimos meses a numerosos desplazados procedentes de Irak y de Raqa, la capital de facto del EI en Siria.

Raqa y Mosul, el último gran feudo de los yihadistas en Irak, son objeto de sendas ofensivas de fuerzas locales respaldadas por la coalición internacional dirigida por Washington.

El Pentágono confirmó que había bombardeado Mayadin y la cercana Bukamal el jueves y el viernes, y aseguró que estaba examinando “los resultados de esos ataques”, en palabras de su portavoz Eric Pahon.

Aunque el ejército estadounidense afirma que toma todas las precauciones necesarias para evitar matar a inocentes, la ONU instó este viernes a “las fuerzas aéreas de todos los Estados” que intervienen en Siria a distinguir mejor entre “los civiles y los objetivos militares”, recordando que los yihadistas se mezclan con la población de las ciudades bajo su poder.

Según el OSDH, los bombardeos de la coalición entre el 23 de abril y el 23 de mayo mataron a más civiles que nunca en un periodo de un mes, desde el inicio de su intervención en el país árabe.