El presidente de Siria, Bashar al Asad, criticó con dureza el ataque estadounidense registrado la madrugada de este viernes, que habría dejado hasta el momento un saldo de 9 civiles muertos, incluidos 4 niños, según autoridades locales.

“Todo lo que ha llevado a cabo Estados Unidos es únicamente un acto idiota e irresponsable, y revela su visión a corto plazo (…) y su ceguera en los planos político y militar” indica un comunicado de la presidencia.

La oficina del presidente Bashar Al Asad también asegura que este bombardeo–primera acción militar directa de Washington contra el régimen de Damasco- “incrementa la determinación de Siria de golpear a los agentes terroristas (concepto que también usan para referirse a opositores)”.

“Atacar el aeropuerto de un Estado soberano es un acto vergonzoso que demuestra una vez más que las diferentes administraciones no cambian sus políticas más profundas”, dijo.

Dos buques estadounidenses situados en el Mediterráneo lanzaron 59 misiles de crucero “Tomahawk” contra la base aérea de Al Shayrat, situada cerca de la ciudad de Homs, en el centro de Siria.

El presidente estadounidense, Donald Trump, explicó que estos ataques estaban “asociados al programa” de armas químicas de Damasco y “directamente relacionados” con los “horribles” acontecimientos del martes.

Ese día, un bombardeo atribuido al ejército sirio contra la localidad de Jan Sheijun (noroeste) dejó al menos 86 muertos, incluidos 27 niños. Las imágenes de las víctimas agonizantes conmocionaron al mundo.

Damasco niega su responsabilidad en el presunto ataque con armas químicas.

Este ataque es la primera acción militar directa de Estados Unidos desde el inicio de la guerra en Siria en 2011.

Este conflicto ha dejado más de 320.000 muertos y ha obligado de millones de personas a huir de sus hogares.