Dos helicópteros del ejército francés se estrellaron este viernes por la mañana en circunstancias aún por determinar en el sureste de Francia causando cinco muertos, un balance muy elevado para este tipo de accidentes.

Los dos aparatos se estrellaron -probablemente tras haber colisionado- cerca del lago de Carcès, a unos 50 km de Saint Tropez.

En uno de los helicópteros los socorristas encontraron los cuerpos de tres personas. Una cuarta víctima fue extraída del otro aparato, según las autoridades locales. Se estaba buscando un quinto cuerpo bajo la carlinga de uno de los helicópteros, precisaron los gendarmes.

Todas las víctimas eran oficiales, agregó una fuente cercana a la investigación.

Una veintena de militares fueron enviados el viernes por la mañana al lugar del accidente, así como autoridades civiles. Dos aviones Dragon y un helicóptero de la gendarmería también llegaron al lugar.

Los helicópteros militares implicados en el accidente son dos aparatos del tipo Gazelle de la Escuela de Aviación Ligera del Ejército de Tierra francés, ubicada en Cannet-des-Maures, a unos 40 km de Saint Tropez, indicó la prefectura del departamento del Var.

Expresando “su profundo respeto por el compromiso de estos oficiales”, el presidente francés Emmanuel Macron trasmitió “sus más sinceras condolencias” a los familiares y allegados de las víctimas.

El modelo Gazelle, cuyos primeros ejemplares entraron en servicio en el ejército a principios de los años 1970, es un helicóptero ligero de reconocimiento y ataque de fabricación francesa.

El accidente del viernes es uno de los más graves ocurridos en los últimos años en Francia. El 20 de mayo de 2016, un helicóptero de la gendarmería se estrelló en el suroeste del país y cuatro gendarmes murieron. La investigación señaló errores del piloto.