El expresidente catalán Carles Puigdemont, destituido por el gobierno central español, afirmó este lunes en Copenhague que próximamente se formará un nuevo gobierno regional a pesar de las “amenazas” gubernamentales.

“No vamos a capitular frente al autoritarismo a pesar de las amenazas de Madrid. Pronto formaremos un nuevo gobierno”, dijo Puigdemont, pocas horas después de se designado candidato a presidir Cataluña.

“Propondré a la cámara al diputado Carles Puigdemont i Casamajó como candidato a la presidencia de la Generalitat (gobierno catalán)”, anunció en una comparecencia en Barcelona el presidente del parlamento catalán, Roger Torrent, tras reunirse la semana anterior con los diferentes partidos.

“Soy consciente de la situación personal y judicial del señor Puigdemont (…) pero soy consciente también de su absoluta legitimidad para ser candidato”, añadió el presidente parlamentario, también independentista.

Puigdemont se arriesga a ser detenido si vuelve a España para su investidura y por eso quiere ser escogido a distancia por el parlamento, donde los independentistas tienen mayoría absoluta tras las elecciones del 21 de diciembre.