El gobierno francés abandonó este miércoles un proyecto de construcción de un aeropuerto que, tras décadas de resistencia, se convirtió en un símbolo de las luchas medioambientales en Francia.

El proyecto del aeropuerto de Notre-Dame-des-Landes (oeste) “será abandonado de forma definitiva”, anunció el primer ministro Edouard Philippe en una conferencia de prensa retransmitida por televisión, haciendo hincapié en las “divisiones” que ha provocado la construcción de este aeropuerto.

Esta decisión pone fin a años de debates sobre un proyecto que nació en 1965, pero aún queda pendiente la evacuación de varias centenares de activistas y agricultores, que ocupan desde hace años el sitio donde tenía que ser construido el aeródromo.

El primer ministro dijo que quería “restablecer rápidamente el Estado de derecho en esta zona”. “Los ocupantes ilegales deberán evacuar (el sitio) antes de la primavera o serán expulsados”, señaló.

Según una fuente cercana a la investigación, las autoridades desplegarán este miércoles a más de 500 policías en Notre-Dame-des-Landes para evitar la llegada de más civiles.

Los activistas ocupan desde 2007 este sitio rural de 1.600 hectáreas en la pequeña localidad de Notre-Dame-des-Landes, donde han construido una comunidad. Un primer intento de evacuar el lugar en 2012 se saldó con violentos enfrentamientos, lo que obligó al gobierno a retirarse.

El proyecto de “Aeropuerto del Gran Oeste” preveía el traslado del actual aeropuerto de Nantes-Atlántico, junto a Nantes, la capital del departamento, a Notre-Dame-des-Landes, 20 km al norte.

El proyecto contaba con el apoyo de sectores empresariales que estimaban que este aeropuerto impulsaría la economía local. Fue aprobado en un referéndum consultivo en junio de 2016 pero se enfrentaba a una oposición férrea, liderada por organizaciones ecologistas, que denunciaban el impacto medioambiental del proyecto.

La alcaldesa de Nantes, Johanna Rolland, denunció la decisión del gobierno de Emmanuel Macron, a la que tildó de “traición” y “negación de la democracia”.

Philippe dijo que en lugar del proyecto de traslado, se modernizará el aeropuerto existente en Nantes y se extenderá su pista, siguiendo las recomendaciones hechas por mediadores el mes pasado.

El Estado francés deberá indemnizar a Vinci, la empresa que había obtenido el contrato de construcción del futuro aeropuerto. Según un informe, la suma se elevaría a 350 millones de euros.