La justicia alemana anunció este martes que abandona la causa contra el exenfermero del campo de exterminio de Auschwitz, Hubert Zafke, de 96 años, debido a que el acusado “ya no está en condiciones de comparecer”.

El Tribunal de Neubrandeburgo anunció la decisión luego de la presentación a fines de agosto de un nuevo informe de expertos psiquiátricos que estimaban que el anciano ya no puede ser juzgado.

“Dada su demencia, ya no está en condiciones de seguir las audiencias, comprender el procedimiento (…) y defenderse de manera eficaz”, explica el tribunal en un comunicado.

Zafke está acusado de “complicidad” en el exterminio de al menos 3.600 judíos muertos en las cámaras de gas al llegar al campamento entre el 15 de agosto y el 14 de septiembre de 1944.

Acorde al periodo retenido por la acusación, 14 convoyes de deportados llegaron a Auschwitz entre esas fechas. En uno de ellos estaba Anna Frank, sus padres y su hermana mayor.

La madre de la adolescente, nacida en Alemania, murió de agotamiento en Auschwitz. Las dos hermanas murieron en Bergen-Belsen a principios de 1945.

El juicio había comenzado en febrero de 2016, pero rápidamente se complicó por las batallas de procedimiento y de expertos sobre la salud del acusado y los pedidos de recusación contra el Tribunal.

En octubre de 2016, la Justicia pidió finalmente que el juicio volviera a foja cero.

Zafke era el cuarto acusado de una serie de juicios tardíos sobre el nazismo, luego del de John Demjanjuk, Oskar Gröning y Reinhold Hanning, los tres condenados en un ambiente solemne en salas de audiencia repletas.

El exenfermero se enroló en la Waffen-SS a los 19 años y combatió en el frente del Este. Fue transferido luego a los campos de Neuengamme y de Auschwitz en el cuerpo médico a cargo de “seleccionar” los deportados destinados a morir.

Zafke ya fue condenado en 1948 a cuatro años de prisión por un Tribunal polaco por sus actividades en Auschwitz y por pertenecer a las Waffen-SS.