El Brexit impactó de lleno el cierre de la campaña electoral para las elecciones del domingo en España, donde la derecha en el poder se erigió en garante de la estabilidad frente al partido antiausteridad de Podemos.

“Es particularmente importante transmitir un mensaje de estabilidad institucional y económica. No son momentos para alimentar o añadir incertidumbre”, advirtió el jefe del gobierno saliente, Mariano Rajoy, en un mensaje sobre la salida de los británicos de la Unión Europea.

El conservador Rajoy, en el poder desde finales de 2011, se cuidó de no referirse directamente a Podemos, que rechaza sus políticas de austeridad, pero otros líderes del Partido Popular (PP) se encargaron de hacerlo.

“El voto de la moderación, de las garantías y de la estabilidad, del crecimiento” debe imponerse, dijo la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal. “La radicalidad y el populismo nunca nos traen estabilidad”, acotó.

Rajoy ha basado su campaña en la necesidad de mantener la política concertada con Bruselas, que a su juicio propulsó a España fuera de la recesión.

Podemos, partido antiausteridad que sube en las encuestas, rechaza las directrices de la Comisión Europea en materia financiera.

Lucha por indecisos

Estas elecciones ocurren apenas seis meses después de las legislativas de diciembre, que dejaron un Parlamento fragmentado entre el PP de Rajoy, los socialistas, Podemos y los liberales de Ciudadanos.

Sin que los partidos alcanzaran acuerdos para formar un gobierno, el rey Felipe VI debió convocar las nuevas legislativas.

Ahora, los partidos de derecha y de izquierda se han batido a duelo para captar los votos de los más indecisos.

El PP, que debería ganar las elecciones con 28% de los votos según las encuestas, ha intentado recuperar el terreno perdido ante Ciudadanos, una agrupación proeuropea.

En la izquierda, la nueva coalición entre Podemos y los ecolocomunistas de Izquierda Unida, Unidos Podemos, podría imponerse como segunda fuerza, por encima de los socialistas.

Dicha coalición fue calificada este viernes de “euroescéptica” por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, que afirmó que sus lideres han abogado “miles de veces” por abandonar el euro.

El euro es un “marco ineludible”, respondió Pablo Iglesias, el líder de Unidos Podemos, en entrevista al canal Antena 3.

“Día triste para Europa. Debemos cambiar de rumbo. De una Europa justa y solidaria nadie querría irse. Tenemos que cambiar Europa”, escribió Iglesias en Twitter.

De su lado, el jefe del PSOE, Pedro Sánchez, criticó las políticas de Bruselas, pero también “el populismo” que ha propuesto “soluciones falsas” a problemas como “la desigualdad y el desempleo” en Reino Unido.

Cargó contra las consultas que trasladan “la ruptura en forma de decisión binaria sí o no sobre problemas complejos que necesitan ser resueltos a través de la política”, en un ataque velado a Podemos, que defiende un referéndum de autodeterminación para Cataluña.

Polarización

A menos de 48 horas de las elecciones, resta ver el impacto real que pudiera tener el Brexit en los 36 millones de electores convocados a las urnas el domingo.

“Podría tener un impacto”, dijo a la AFP el politólogo Pablo Simón, de la Universidad Carlos III. Un evento que trae incertidumbre “tiende a favorecer al partido en el gobierno”, señaló.

Para Sara Morais, del instituto GAD3, el Brexit podría reforzar la polarización, lo cual le beneficia a Podemos y al PP.

“Puede inclinar más el voto hacia la estabilidad”, indicó.

Pero el Brexit dejó ver que “el poder del pueblo pasó por encima del ‘establishment’. El mensaje fue: sí se puede hacer un cambio”, lo que beneficiaría a Podemos, agregó.