El presidente estadounidense Donald Trump y su homólogo surcoreano Moon Jae-In, afirmaron que el nuevo lanzamiento de un misil por parte de Corea del Norte representa una amenaza “para el mundo entero”.

“Los dos dirigentes han destacado la grave amenaza que la última provocación de Corea del Norte deja caer no sólo sobre Estados Unidos y Corea del Sur, sino sobre el mundo entero”, indicó la Casa Blanca en una nota sobre la llamada telefónica entre ambos líderes.

El misil fue disparado el miércoles de madrugada hora norcoreana desde Sain-ni, cerca de Pyongyang, y cayó frente a Japón. El Pentágono precisó que el misil, que voló unos 1.000 kilómetros y que cayó frente a las costas de Japón, no supuso un peligro ni para Estados Unidos ni para sus aliados.

Al menos un experto indicó que su elevada trayectoria sugiere que Pyongyang podría tener la tecnología para lanzar un proyectil a más de 13.000 kilómetros, lo que coloca a todas las ciudades estadounidenses a su alcance.