La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) descartó el jueves señales de toxicidad peligrosa en la humareda producida tras explosiones registradas en una planta química en Texas, inundada tras la tormenta Harvey.

“La EPA tiene personal de respuesta de emergencia en el lugar y la agencia está revisando los datos recibidos de una aeronave a primera hora de la mañana”, señaló la agencia en un comunicado.

“Esta información indica que no hay concentraciones preocupantes por los materiales tóxicos reportados en este momento“, añadió con relación a la explosión de la planta de la empresa francesa Arkema, ubicada en Crosby, 40 km al noreste de Houston.

Antes de la declaración de la EPA, el director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias(Fema), Brock Long, había dicho que el humo proveniente de las explosiones “es extremadamente peligroso”.

“Nosotros basamos un cierto número de evacuaciones en lo que llamamos modelización del humo, en consecuencia, sí, este humo es extremadamente peligroso”, declaró Long, en una conferencia de prensa.

Ed Gonzalez, jefe de policía del condado de Harris, que incluye a Houston, explicó que respirar estos vapores equivalía a inhalar el humo de un fuego de campamento.

Pero ni Rennard ni el bombero experto en incidentes químicos Bob Royall, también presente, reiteraron esta afirmación.

Las autoridades ya habían establecido un perímetro de seguridad de 3 km alrededor de la planta la noche de martes a miércoles como medida de precaución.