Estados Unidos pidió a Irán liberar inmediatamente a ciudadanos estadounidenses “injustamente detenidos” por la república islámica, dijo este domingo un funcionario del Departamento de Estado, luego de que un estadounidense acusado de “infiltración” fuera condenado a diez años de prisión por la justicia iraní.

“El régimen iraní continúa con la detención de ciudadanos estadounidenses y de otras nacionalidades sobre la base de cargos inventados en materia de seguridad nacional”, dijo el funcionario, en un contexto de tensas relaciones entre Washington y Teherán tras la llegada al poder del presidente Donald Trump.

“Pedimos la liberación inmediata de todos los estadounidenses injustamente detenidos en Irán para que puedan regresar con sus familias”, añadió el responsable, sin hacer ninguna referencia específica a una persona.

Este domingo, la justicia iraní había anunciado la condena a 10 años de cárcel contra un estadounidense acusado de “infiltración” al país, sin precisar la identidad.

El portavoz de la justicia iraní Gholamhossein Mohseni-Ejeie solo indicó que el acusado posee “otra nacionalidad” (no iraní).

“El individuo estaba dirigido directamente por los estadounidenses” en su misión, añadió Mohseni-Ejeie, señalando que el acusado “apeló su condena”.

Dos ciudadanos iraníes que también tienen la nacionalidad estadounidense, el empresario Siamak Namazi y su padre Mohamad Bagher Namazi, fueron condenados en octubre de 2016 junto a otras cuatro personas a diez años de prisión por “espionaje” a favor de Estados Unidos.

Washington y Teherán no tienen relaciones diplomáticas desde 1980, tras la Revolución Islámica y tras un periodo de tímido acercamiento durante el segundo gobierno de Barack Obama, los lazos se tensaron nuevamente.