Uno de los peores crímenes posibles se desarrolló el último domingo en Oregón, Estados Unidos, cuando un hombre de 36 años asesinó a su madre.

Mientras la mayor parte del mundo celebraba el día de la madre, Joshua Lee Webb decapitó a su progenitora, y luego exhibió su cabeza en la vía pública, consignó The Washington Post.

Webb apareció la tarde del domingo en un supermercado de Estacada; en una mano tenía un cuchillo manchado con sangre y en la otra, llevaba una cabeza humana.

El hombre apuñaló en reiteradas ocasiones a un empleado de la tienda, identificado como Michael Wagner de 66 años, quien resultó gravemente herido, por lo que tuvo que ser trasladado a un hospital cercano, donde se recupera de las heridas.

Otros trabajadores lograron reducir a Webb y llamaron a la policía. Los agentes arrestaron a Webb, quien permanece detenido en la cárcel del condado de Clackamas.

La policía confirmó que la cabeza que cargaba el hombre pertenecía a su madre y agregó que el homicidio se cometió en otra localidad, Colton, donde vivían los involucrados, confirmando que Webb viajó con los restos de la mujer en su automóvil.

El padre del acusado y esposo de la víctima, David Webb, se mostró consternado por lo ocurrido, asegurando que nunca detectó problemas en su hijo que lo llevaran a cometer este delito.

“Ojalá tuviera respuestas, pero no tengo. He esperado toda mi vida para jubilarme con mi mujer y ahora no puedo. Es lo único que sé”, comentó Webb a la Associated Press.

Webb hijo vivía con sus padres en Colton y recibía una pensión del gobierno, pues se encontraba en situación de discapacidad, debido a que tenía problemas de visión.