El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, denunció el miércoles como una “afrenta a la humanidad” el supuesto ataque químico en Siria que dejó 72 muertos, incluidos una veintena de niños, y advirtió que “no puede ser tolerado”.

En una conferencia de prensa junto al rey Adalá II de Jordania, Trump calificó como “atroz” la agresión contra “gente inocente, mujeres, pequeños niños e incluso pequeños bebés”. El ataque “superó varios límites”, afirmó.

Su muerte es una afrenta a la humanidad. Esos actos de odio por el régimen de (Bashar al) Asad no pueden ser tolerados“, dijo el mandatario sin dar detalles de qué acciones podría tomar Estados Unidos tras el presunto ataque químico en la provincia de Idbil.

En un claro alerta sobre el cambio de tono de su gobierno, Trump dijo que su “actitud con relación a Siria y Asad ha cambiado. Ahora estamos hablando de otro nivel, completamente diferente”.

En la conferencia de prensa, Trump también reiteró su promesa de “destruir” al grupo radical Estado Islámico (EI) para “proteger la civilización”.

“Destruiremos al EI, y protegeremos a la civilización. No tenemos elección. Protegeremos a la civilización”, dijo en su conferencia junto a Abdalá.

Jordania integra la coalición militar encabezada por Washington que lucha contra el EI en Siria e Irak.

En la sede de las Naciones Unidas, la embajadora de Estados Unidos, Nikki Haley, amenazó con medidas unilaterales estadounidenses en Siria.

“Cuando Naciones Unidas fracasa consistentemente en su tarea de actuar en forma colectiva, hay momentos en la vida de los estados en los que nos vemos impulsados a actuar por nuestra cuenta“, dijo Haley.