Donald Trump había prometido durante la campaña donar su salario de presidente a una organización sin fines de lucro: finalmente optó por el Servicio de Parques Nacionales.

Durante un anuncio hábilmente puesto en escena, su portavoz Sean Spicer entregó al secretario de Interior, Ryan Zinke, un cheque de 78.333,32 dólares, correspondientes a los primeros meses de salario de Trump en la Casa Blanche.

La relación entre el presidente republicano y el Servicio de Parques Nacionales (NPS) había comenzado de forma turbulenta.

Al día siguiente del juramento del magnate inmobiliario como presidente, el NPS pidió disculpas, de manera poco común, por algunos de sus tuits.

Uno de ellos provocó al parecer la ira de la Casa Blanca: comparaba de forma poco favorable, con fotos de prueba, la multitud reunida en el National Mall de Washington en apoyo de Barack Obama para su investidura en 2009 con la claramente menor que se congregó por Donald Trump en 2017.