Donald Trump nombró a la gobernadora Carolina del Sur Nikki Haley como embajadora de Estados Unidos ante la ONU.

Haley, hija de inmigrantes indios, se convierte así en la primera mujer en integrar el futuro gobierno de Trump.

Aunque tiene poca experiencia en política exterior, su designación aporta diversidad al equipo de gobierno del magnate inmobiliario, muy crítico con la inmigración en Estados Unidos.

Haley fue muy dura con Trump durante la campaña electoral, a quien describió en febrero como “todo lo que un gobernador no quiere en un presidente”.

La gobernadora apoyó al senador Marco Rubio durante las primarias republicanas y luego secundó la candidatura del senador Ted Cruz.

Su nominación como embajadora ante Naciones Unidas deberá ser confirmada por el Senado.