Donald Trump negó rotundamente este viernes cualquier conducta sexual inapropiada y culpó al mexicano Carlos Slim de un complot mediático para torpedear su campaña, al tiempo que se apilan acusaciones de mujeres contra el aspirante republicano.

El presidente Barack Obama advirtió de su lado que “la democracia misma está en juego” en las elecciones generales del 8 de noviembre, en señal de la preocupación creciente de la Casa Blanca por el millonario de bienes raíces.

En un mitin en Carolina del Norte (sureste) Trump recordó que Slim es el primer accionista individual del grupo New York Times, cuyo diario insignia publicó el miércoles relatos de dos mujeres que acusaron a Trump de manosearlas y besarlas, años atrás.

Este viernes otras dos mujeres se sumaron a la acusación contra el candidato republicano por conducta sexual inapropiada.