La aspirante demócrata Hillary Clinton, de gira en Florida, se reúne con sus seguidores este sábado en un mítin en Miami donde por primera vez hace campaña con su candidato a la vicepresidencia, el senador Tim Kaine.

El mitin en el estadio de la Universidad Internacional de Florida tiene lugar al día siguiente de que Clinton anunciara la elección de Kaine como su compañero de fórmula en un mensaje en Twitter.

A la espera del discurso de los aspirantes demócratas, una multitud sostenía carteles azules con la leyenda “Clinton-Kaine”. Detrás del escenario donde hablarán los candidatos, una pancarta ponía “Stronger Together” (más fuertes juntos).

La expectación era visible. En la larga fila de seguidores que aún esperaban entrar al estadio, Valeria Ebos, una jubilada de 58 años, dijo que Kaine “proporcionará un buen equilibrio a la fórmula” presidencial.

“Soy fan de Hillary desde los años ’90 y ahora la veremos en la Casa Blanca”, dijo Ebos. Que sea la primera mujer presidente de Estados Unidos no es para ella un factor a tomar en cuenta. “Lo importante es su competencia y su experiencia”.

Senador por Virginia y exgobernador de ese mismo estado, Kaine es un discreto pero eficiente político de 58 años que sin embargo aún no es suficientemente conocido por el público en general.

“No sé mucho de él, pero supongo que es un demócrata sólido”, dijo en la fila Elliot Williams, un bibliotecario de 30 años, delgado y de gafas redondas.

El entusiasmo de los seguidores está a flor de piel a dos días del inicio de la convención demócrata que comienza el lunes en Filadelfia, Pensilvania, y donde Clinton y Kaine deberán ser investidos oficialmente como los candidatos del partido a la presidencial de noviembre.

Kaine ya ha ocupado el escenario en diversos actos de campaña con Clinton, en ocasiones haciendo largos discursos en español. Con su fluidez en este idioma tras pasar su juventud en Honduras, Miami parece el lugar apropiado donde presentar al público su candidatura a la vicepresiencia.

Esta semana, el número dos del rival republicano Donald Trump, el gobernador de Indiana, Mike Pence, aceptó su nominación en una tumultuosa convención republicana en Cleveland.

Las encuestas sugieren que el multimillonario neoyorquino está muy cerca de Clinton, quien aún lucha por dejar atrás un escándalo por el uso de su servidor personal para correos electrónicos cuando era secretaria de Estado.