El Gobierno de Chile, a través de un comunicado, criticó la denominada limpieza étnica que se está desarrollando en Myanmar, antigua Birmania, en contra de la minoría musulmana Ronhingya.

En el país asiático, desde hace dos semanas se registró una ofensiva militar contra civiles, como parte de una operación de seguridad. Lo anterior, luego de que grupos extremistas de dicha etnia atacaran cuarteles policiales.

De acuerdo a las cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU), más de 380 mil personas han sido desplazadas por este conflicto, quienes han arrancado hacia Bangladesh en busca de refugio. Entre ellos, mujeres y niños que nada tienen que ver con el altercado inicial en el estado de Rajine.

En el documento emitido desde el Gobierno, lamentaron “la violencia y deterioro de la situación humanitaria en Myanmar, que afecta a la minoría étnica musulmana Rohingya y hace un llamado al gobierno de ese país, y especialmente a las fuerzas militares y policiales, a tomar acciones dirigidas a detener la escalada de violencia”.

En el mismo, pidieron a los asiáticos que miembros de la ONU puedan ingresar al territorio para garantizar los derechos humanos.

La situación es crítica, por lo que diferentes autoridades del mundo se han manifestado en contra lo que está ocurriendo allí.