Miles de peruanos marcharon el miércoles en Lima en rechazo a la corrupción, horas antes de que el Congreso inicie el debate para decidir si destituye al presidente Pedro Pablo Kuczynski por sus lazos con la empresa brasileña Odebrecht.

Cuatro monigotes de color negro, representando a los presidentes peruanos con acusaciones de corrupción, encabezaban la movilización, organizada por varios colectivos civiles.

“Que se vayan todos”, “Una marcha por la democracia”, eran los lemas en grandes pancartas detrás de los “gallinazos”, los monigotes.

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La marcha pacífica se inició al anochecer en la Plaza San Martín, a unos 500 metros de Palacio de Gobierno, y continuó por la céntrica Avenida Abancay.

A unos metros de llegar al Congreso el movimiento se desvió con sus carteles señalando: “No al narcotráfico”, “No a la corrupción”, “Que se vayan todos”, “Que se vayan los corruptos”.

Otro cartel pedía “Que se vayan los fujimoristas”, en alusión al partido liderado por Keiko Fujimori, que controla el Congreso peruano.

La constructora brasileña admitió que pagó casi cinco millones de dólares por asesorías a empresas vinculadas a Kuczynski entre 2004 y 2013, desencadenando una crisis que tiene al mandatario a punto de ser destituido.

José Bracamonte, vocero de la Coordinadora Nacional de los Derechos Humanos, uno de los organizadores de la movilización, dijo que la marcha era en defensa de la democracia. “No estamos a favor de un político, sino contra todos los corruptos”, expresó.

“Todos los peruanos estamos asombrados con los casos de corrupción de la empresa brasileña Odebrecht. Al parecer ningún presidente se escapa de haber recibido dinero de esta constructora, elegimos un presidente y ya está corrupto, qué vamos a hacer”, señaló.

Bracamonte dijo que la marcha tenía también como fin “no permitir ningún golpe a la democracia, que es lo que pretende el fujimorismo, pero tampoco vamos a proteger a ninguna persona”.

Odebrecht admitió que desembolsó en Perú sobornos por 29 millones de dólares entre 2005 y 2014, durante los gobiernos de Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011), Ollanta Humala (2011-2016).

Las confesiones de Marcelo Odebrecht, propietario de la empresa, han llevado a prisión preventiva al expresidente Ollanta Humala y a su esposa, por presuntamente recibir tres millones de dólares para su campaña electoral de forma irregular.

La justicia peruana ha solicitado a su vez la extradición del expresidente Alejandro Toledo, desde Estados Unidos, mientras varios funcionarios del segundo gobierno del expresidente Alan García (2006-2011) también están presos, por supuestos sobornos para otorgar la construcción de una línea de metro.

Kuczynski fue presidente del consejo de ministros y ministro de Economía durante el gobierno de Toledo.