Durante una ceremonia gubernamental en septiembre de 2011, la entonces presidenta de Argentina, Cristina Fernández, anunció el término de las reparaciones del submarino ARA San Juan, declarando que este tendría una vida útil de 30 años; algo que cada vez se aleja más de la realidad debido a su actual desaparición y una posible explosión que habría sufrido.
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Hace 6 años, en el Complejo Industrial Naval Argentino (Cinar), la exmandataria estuvo acompañada por parte de su gabinete y comunicó el éxito de las labores de reconstrucción del sumergible argentino, el cual había sido construido en Alemania en 1985.
En la instancia destacó el trabajo de quienes estuvieron involucrados, precisando la gran cantidad de horas “hombre” que estuvieron invertidas en el proyecto y celebró que pronto estaría listo para su funcionamiento.
“Este submarino comienza sus tareas de alistamiento y en diciembre, pato al agua: funcionando. Es un gran orgullo porque su hermano o gemelo, el ARA Salta, no pudo tener esta reconstrucción en la Argentina porque se había desmantelado la industria naval”, declaró al diario La Nación del país trasandino.
Finalmente, agregó: “Esta puesta nueva nos permitirá una vida útil de más de 30 años para este submarino San Juan”.
Sin embargo, durante la últimas semanas y 6 años después, se hizo de público conocimiento la desaparición de dicho navío con 44 tripulantes y 8 días sin comunicaciones, además de confirmarse este jueves que habría sufrido una explosión.
