El gobierno de Panamá afirmó este domingo que la inhabilitación impuesta al líder opositor Henrique Capriles para ejercer cargos públicos durante 15 años en Venezuela “agrava” la situación que vive el país sudamericano, al tiempo que llamó a evitar actos de violencia durante las protestas.

La Contraloría venezolana anunció el viernes la sanción contra Capriles por presuntas “irregularidades administrativas” cometidas durante su gestión como gobernador del estado de Miranda, lo que le impediría presentarse en las elecciones presidenciales de 2018.

“Panamá reitera su preocupación por la situación política y social que enfrenta Venezuela”, que “se agrava con (la) inhabilitación” de Capriles, señaló la cancillería panameña en un comunicado.

El gobierno panameño hizo un llamado “a respetar el orden constitucional y crear las condiciones para la realización de unas elecciones justas, democráticas y transparentes“.

Asimismo, “reitera la importancia de que Gobierno y oposición venezolana apuesten por la búsqueda del entendimiento, a fin de evitar actos de violencia como los que se han suscitado recientemente y garantizar el bienestar de la población“, concluye la nota.

Miles de venezolanos salieron a las calles de Caracas el sábado -la cuarta marcha en una semana- en rechazo a la sanción contra Capriles y dos fallos del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), con los que se adjudicó temporalmente los poderes del Parlamento y retiró la inmunidad a los diputados.

Las sentencias fueron luego anuladas parcialmente tras un fuerte rechazo internacional.

Al menos 17 personas resultaron heridas el sábado en los choques entre civiles armados y las fuerzas del orden, que dispersaron a los manifestantes con gases lacrimógenos, chorros de agua y balas de goma.