El fiscal general de Brasil, Rodrigo Janot, solicitó este martes la apertura 83 investigaciones adicionales contra políticos en el marco del escándalo de corrupción en Petrobras.

Janot envió los pedidos al Supremo Tribunal Federal (STF) “a partir de los acuerdos de delación premiada firmados con 77 ejecutivos y exejecutivos de las empresas Odebrecht y Braskem”, precisó la Fiscalía en un comunicado.

El organismo no divulgó la identidad de los sospechosos ni los hechos que se les reprochan, porque los expedientes aún se encuentran bajo secreto de sumario. Pero por tratarse de un pedido al STF, en cada solicitud hay involucrado por lo menos un político con fuero privilegiado, como ministros y legisladores.

También podrían figurar en la misma causa personas sin fueros, pero estrechamente relacionadas con los delitos investigados, indicó una portavoz del Ministerio Público federal (MPF).

Algunos testimonios filtrados en los últimos meses a la prensa local apuntan directamente a integrantes de la cúpula del PMDB, partido del presidente conservador Michel Temer, que asumió el poder en 2016 tras la destitución por el Congreso de la mandataria de izquierda Dilma Rousseff.

Janot pidió a la corte suprema levantar el secreto de todo el material, para “promover la transparencia y garantizar el interés público”, añadió la nota.

Unos 116 fiscales tomaron más de 950 declaraciones judiciales a los delatores de la constructora. Las comparecencias fueron filmadas.

El material -unos 500 GB de archivos digitales, informó la fiscalía- será divulgado cuando lo ordene el juez encargado del caso en el STF, Edson Fachin, quien no tiene un plazo para tomar esa decisión.