Una crónica de diario El País de España revela el grave abuso que viven muchas mujeres en Brasil, se trata de las “violaciones en grupo”, un crimen que muchas veces no es denunciado.

El reportaje toma el caso de Claudia, nombre ficticio para ocultar la identidad de una mujer que fue víctima de una violación grupal en Río de Janeiro.

Imploraba para que parasen, pero no servía de nada. Me hacían más daño. Poco a poco aparecieron más hasta que me di cuenta de que había diez hombres abusando de mí. Me decían que me matarían que me lanzarían a una cloaca si gritaba”, cuenta el testimonio de Claudia.

Su caso salió a la luz pública a finales de octubre, la mujer comenzó a ser víctima de abusos y violaciones por parte de los narcotraficantes de su favela, después de que su novio divulgara en redes sociales un video sexual de ella.

De esta forma, la mujer se transformó en el “juguete sexual” de los traficantes de su barrio, incluso la obligaban a tener sexo en plena calle.

Una noche, un grupo de 10 menores de edad la encontraron en un bar y amenazaron con violarla con ramas de árboles, pero afortunadamente apareció una patrulla de policías.

Los oficiales llevaron a la mujer a una comisaría, por lo que se vio obligada a denunciar, tras eso tuvo que abandonar su casa y unirse a un programa de protección de víctimas, aunque afirma que su “vida está devastada”.

Redes sociales

Los casos de violaciones grupales en Brasil solían quedar en el anonimato, pero la aparición de redes sociales ha hecho que muchos de estos hechos sean divulgados, generalmente por los victimarios.

A fines de mayo de 2016, se conoció el caso de una joven de 16 años que fue drogada y violada por más de 30 hombres, un suceso que salió a la luz pública porque los victimarios grabaron los abusos y las imágenes de se difundieron en internet.

Aunque la investigación posterior demostró que eran menos de 30 los violadores, sí se detuvieron a 7 sospechosos de participar en el brutal ataque, que logró dar visibilidad a un tema complejo.

La detective a cargo de este caso, Cristiana Bento, explica que ha tenido que investigar otros 3 hechos similares, que no han aparecido en los periódicos y que muchas veces las mujeres no se dan cuenta de que son víctimas de estos delitos.

“A menudo, en las favelas, el jefe del tráfico de drogas, elige a las chicas que los traficantes usarán para satisfacer sus deseos sexuales y las familias no pueden hacer nada. Son ellos los que imponen las reglas de conducta y quien se rebela paga con su vida”, señala Bento.

Violencia contra la mujer

Una encuesta del Instituto Datafolha señala que el 30% de las personas en Brasil piensa que si una mujer usa “ropa provocativa”, no puede quejarse de ser violada.

Una cifra que preocupa a las autoridades que han aprobado una serie de leyes para castigar la violencia contra la mujer e incluso tipificar delitos como las violaciones grupales, iniciativa aprobada en junio pasado por el Senado.

Medidas que no logran ser efectivas, pues las tasas de denuncias son bastante bajas. El Foro de Seguridad Pública de Brasil estima que en ese país sólo el 10% de las violaciones contra las mujeres se denuncian, por lo que la cifra oficial de 45.460 (125 diarias) está lejos de la realidad.

La Organización Mundial de la Salud en 2013 estimó que 4.762 mujeres fueron asesinada ese año en Brasil, siendo el quinto país del mundo con la mayor tasa de homicidios de género.