La oposición venezolana hizo un llamado a las autoridades para mantener el proceso hacia un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, al alertar este lunes sobre un estallido social que traería una eventual decisión judicial que anule ese pedido.

Mensaje que se da debido a las alertas existentes en la oposición por una sentencia que podría emitir el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) la cual impediría continuar con el proceso para convocar a un revocatorio, que la oposición exige se realice en 2016.

Dichas sospechas fueron aseguradas por Henrique Capriles, gobernador del estado Miranda y excandidato presidencial, quien sostuvo que la vía electoral es la esperanza que tienen los venezolanos ya que cancelar la consulta podría colocar al país en una situación de mayor peligro e incertidumbre, por lo cual esperan que las intenciones del Ejecutivo Venezolano sean simplemente un rumor.

“No queremos un estallido social en Venezuela”, declaró en una rueda de prensa, acompañado por la mayor parte de los dirigentes de la opositora coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

En referencia a un posible golpe de Estado, argumento esgrimido en variadas ocasiones desde el oficialismo, Capriles indicó que la oposición no quiere esa vía. “No puede ser que en el país se profundice la crisis sólo porque una persona no quiere someterse al escrutinio, hay gente dentro de la Fuerza Armada completamente en contra de que se genere una decisión de ese tipo”, agregó.

La tensión por la realización o no de la consulta se da mientras el país caribeño enfrenta una crisis económica y social debido a la alta inflación, la escasez de productos y la inseguridad personal. A lo anterior se suman las demandas judiciales presentadas recientemente por sectores oficialistas contra la convocatoria.

La MUD debe recoger unos 4 millones de firmas entre el 26 y el 28 de octubre, correspondientes al 20% del padrón electoral, para que se convoque el referendo revocatorio. Por ello, este miércoles preparan una jornada de movilización previa, en la que han llamado a concentraciones en los 1.356 puntos de recaudo de firmas establecidos por la autoridad electoral.

Pese a que el Consejo Nacional Electoral ya declaró que el referendo sólo podría realizarse a partir de febrero, la MUD insiste en que se haga este año porque si Maduro pierde habrá que llamar a elecciones anticipadas.

Es necesario recordar que si la consulta queda para 2017 y Maduro es revocado, su vicepresidente debe terminar su periodo hasta 2019.