Una sobrina de Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), apareció muerta en la localidad mexicana de Toluca, tras haber sido secuestrada hace una semana, dijo este martes el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel García-Margallo.

“Son de las noticias que producen un disgusto enorme, no sólo porque sea española sino porque hablé desde el principio con su tío Angel María y hemos estado volcados en este tema”, afirmó Margallo a la radio Onda Cero.

“Lo más triste es que creíamos que se iba a solucionar fácilmente por los datos que teníamos y no ha sido así”, añadió desde Nueva York, donde se encuentra con motivo de la Asamblea General de Naciones Unidas.

El ministro relató que el rapto se produjo “el martes 13 por la noche” cuando “los secuestradores recorren varios cajeros intentando sacar dinero, y al día siguiente se ponen en contacto con la familia (para pedir un rescate) y la familia se pone en contacto con nosotros”.

Según la edición en línea del diario El Mundo, la víctima fue secuestrada cuando intentaba sacar dinero en un cajero del sector de “Santa Fe, un enorme desarrollo urbano de la capital, Ciudad de México, de clases acomodadas”.

Los secuestradores pidieron 200.000 pesos (unos 10.000 dólares), según varios medios.

Las gestiones de las autoridades españolas con las mexicanas permitió que “su marido y un primo suyo, que es Gorka (hijo de Angel María Villar, ndlr) lleguen allí con dos policías españoles para intentar resolver el tema”, explicó García-Margallo.

El canciller relató que se había pagado una cantidad, aunque inferior a la solicitada por los secuestradores, y “estábamos convencidos de que era cuestión de tiempo que apareciese libre y sana, y por desgracia no ha sido así”.

“El marido y el primo han ido recorriendo distintas instalaciones funerarias y el cuerpo ha aparecido en Toluca”, concluyó el ministro español.