Representantes del Mercosur se reunirán el jueves en Montevideo para intentar sanjar la crisis que sacude al bloque por el traspaso de su presidencia a Venezuela, cuyo mandatario Nicolás Maduro ya desafió al grupo afirmando que su país ejercerá su mandato.

En una nueva jornada de tensión política para el bloque, Paraguay anunció el miércoles la reunión del Mercosur, mientras Uruguay negó ser responsable de la crisis que vive el grupo.

El canciller de Paraguay, Eladio Loizaga, anunció en Asunción que vicecancilleres y coordinadores técnicos de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay se darán cita en la sede del Mercosur, en Montevideo, pero sin representantes de Venezuela.

“En Montevideo vamos a discutir cómo afrontar estos seis meses que vienen. Quizás podemos ir revisando el Protocolo de Adhesión de Venezuela para subsanar esta situación de la presidencia, y podría tranquilamente seguirse luego el orden alfabético y Argentina tomar la presidencia”, expresó Loizaga en rueda de prensa en Asunción.

La cita no fue confirmada por la cancillería uruguaya a la AFP, pero su similar de Paraguay indicó en un comunicado que el encuentro será en la sede del Mercosur desde las 12H00 (13H00GMT) del jueves.

“La sede administrativa nos pertenece a todos los Estados miembros”, enfatizó el canciller paraguayo, para añadir luego que el encuentro “no se realiza bajo el paraguas del gobierno del Uruguay que era en su momento el coordinador”.

“Nos autoconvocamos, hablamos con los cancilleres José Serra (Brasil), Susana Malcorra (Argentina), y decidimos reunirnos en Montevideo para analizar toda la documentación”, detalló.

“Triple alianza de torturadores”

La convocatoria es una respuesta a lo que Paraguay considera una autoproclamación de Venezuela como presidente pro témpore del Mercosur, luego de que el viernes Uruguay dejara vacante el puesto tras su período de seis meses en la coordinación del bloque.

Venezuela considera que está al frente del Mercosur, aunque no hubo consenso entre los países miembros para transferirle ese puesto y Brasil, Paraguay y Argentina desconocen su mandato.

Precisamente, este miércoles el presidente venezolano desafío al bloque afirmando que su país ejercerá “plenamente” la presidencia pro témpore y fustigó a esos tres países.

“Somos presidentes de Mercosur y lo vamos a ejercer plenamente”, dijo Maduro durante un acto oficial en Caracas.

El mandatario socialista aseguró que su país es perseguido por los gobiernos de Argentina, Brasil y Paraguay, a los que llamó “la triple alianza de torturadores de Suramérica”.

“Ahora nos persigue (…) la oligarquía paraguaya, corrupta y narcotraficante. Ahora nos persigue el demacrado (presidente Mauricio) Macri de Argentina, fracasado, repudiado por su pueblo. Y ahora nos persigue la dictadura impuesta en Brasil”, añadió el gobernante.

Responsabilidad de la crisis

Pese a la postura de Caracas, el canciller paraguayo insistió en los tres países señalados por Maduro están “plenamente de acuerdo en encontrar una solución a esta acefalía”.

Aunque Caracas insiste que ejerce la presidencia del Mercosur, “para nosotros no, porque tiene que darse esta asunción en el marco de la reunión del Consejo Mercado Común y de los jefes de Estado”, remarcó Loizaga.

Al responder críticas del canciller brasileño hacia la decisión uruguaya, el canciller de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, dijo de su lado en Montevideo que su país “cumplió estrictamente con las normas mercosurianas”.

Montevideo “convocó a una reunión del Consejo del Mercado Común” para el 30 de julio y “el lunes 27 dos países, Paraguay y Brasil, nos dijeron que no iban a venir”, dijo el canciller uruguayo a periodistas.

“Por lo tanto la responsabilidad (de la crisis) no es del Uruguay”, aseveró.

“El Uruguay cumplió al pie de la letra con toda la normativa. Las presidencias duran seis meses. Por lo tanto Uruguay no iba a usurpar la presidencia del Mercosur” que “le correspondía a Venezuela”, dijo reiterando la postura de su gobierno.

Uruguay quedó solo en su posición tras un cambio de rumbo de Argentina, que se plegó a Brasil y Paraguay, países que desde un comienzo se oponen a que Venezuela coordine al Mercosur por la situación política que atraviesa el gobierno de Nicolás Maduro y con el argumento de que Caracas no ha adecuado su normativa a la del bloque sureño, al que ingresó en 2012.