Leopoldo López, líder emblemático de la oposición venezolana al gobierno de Nicolás Maduro, comparece este viernes ante la justicia en una audiencia de apelación de su condena a casi 14 años de cárcel.

López fue llevado desde la prisión militar de Ramo Verde, en las afueras de Caracas, a los tribunales de Justicia, en el centro de la ciudad, confirmaron los abogados defensores, sin que hasta ahora haya sido visto por la prensa, que espera en las afueras del complejo judicial.

Las autoridades permitieron ingresar al Palacio de Justicia a la madre de López, Antonieta Mendoza, y al abogado venezolano Juan Carlos Gutiérrez, pero no a los asesores españoles de la defensa, constataron periodistas de AFP.

Medio centenar de simpatizantes llegaron desde temprano con fotos del opositor y pancartas que rezaban “Leopoldo. Libertad ya” y “Querer una mejor Venezuela no es delito“.

Poco después, un grupo de chavistas acudió al lugar: “¡Acá el que manda es Maduro!“, “¡Leopoldo, asesino!“, gritó un hombre con una pancarta con la foto del presidente.

De 45 años, López fue condenado en septiembre de 2015 por cargos de incitación a la violencia en las protestas, entre febrero y mayo de 2014, que dejaron 43 muertos, y que buscaban la renuncia de Maduro tras las elecciones que ganó por estrecho margen en 2013.

López fue encarcelado en febrero de 2014 y se convirtió en el símbolo de los opositores venezolanos presos -que la disidencia cifra en un centenar-, entre ellos el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, y el exalcalde de San Cristóbal (oeste) Daniel Ceballos.