Los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro mostrarán la “democracia estable” de Brasil, dijo este miércoles el presidente interino Michel Temer, acusado por Dilma Rousseff de liderar un golpe para sacarla del poder a través de un impeachment.

“Cuando se cuelguen las medallas, estaremos mostrando Brasil al mundo un Brasil donde la democracia es estable, donde las cosas están marchando muy bien, donde las instituciones funcionan”, indicó Temer al recibir en Brasilia a la delegación de atletas que disputarán los Juegos en casa del 5 al 21 de agosto.

“Quiero registrar la simbología de este momento en que se darán las Olimpíadas de Rio. Es un momento de confraternización universal. El deporte es un medio para integrar personas y hacerlas amigas, que es lo que estamos haciendo en Brasil”, añadió Temer, que asumió el poder el 12 de mayo, después de que el Senado suspendiera a Rousseff para enjuiciarla por maquillaje de las cuentas públicas.

Rousseff, que acusa al que fuera su vicepresidente durante cinco años de haber urdido un “golpe de Estado” parlamentario en su contra, conocerá el veredicto a finales de agosto, poco después de que acaben los Juegos.

En caso de que sea finalmente destituida -para lo que son precisos los votos de dos tercios de los senadores- Temer completará el mandato hasta el final de 2018. Si la cámara la absuelve, Rousseff retomará inmediatamente su cargo.

Como jefe de Estado, Temer será quien declarará abiertos los Juegos Olímpicos el 5 de agosto en una ceremonia a la que Rousseff también fue invitada.

Unos 60 atletas de la delegación brasileña acudieron al acto de este martes, junto al presidente del comité organizador Rio-2016 y del Comité Olímpico Brasileño (COB), Carlos Nuzman, y otras autoridades.