El fabricante automovilístico alemán Volkswagen y dos de sus coempresas locales van a llamar a revisión 1,82 millones de vehículos en China, anunció el lunes el regulador de aquel país, lo que supone un serio revés para el grupo en un importante mercado.
Volkswagen y sus ‘joint ventures’ con los constructores chinos FAW y SAIC llamarán a revisión esos vehículos, mayoritariamente fabricados en la nación asiática, debido a potenciales defectos en las bombas de gasolina, precisó el organismo de control de calidad de China.
Esta firma es el número uno mundial del sector, mientras que China es el primer mercado automovilístico mundial.
Esto se suma a un llamado a reparación que la firma hizo hace algunos días para 281.000 autos en Estados Unidos por defectos en la bomba de combustible.
Volkswagen ofreció arreglar los sedan CC de 2009-2016 y los Passat y Passat Wagons de 2006-2010. Según la empresa, esos vehículos tienen bombas de combustible defectuosas.
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“La interrupción de la electricidad al módulo de control de la bomba puede hacerla fallar… Si la bomba de combustible falla, el automóvil se detiene y se incrementa el riesgo de accidente”, indicó la empresa en una nota a las autoridades estadounidenses.
