Ford anunció este lunes en el salón del automóvil de Detroit que volverá a producir dos modelos míticos en Estados Unidos para reemplazar el Focus cuya fabricación será trasladada a México.
La marca del óvalo azul reanudará la producción del jeep Bronco y de la pickup Ranger, precisó su presidente Mark Fields en la conferencia de prensa del primer día del salón.
Los dos vehículos serán montados en la fábrica de Wayne, en Michigan (norte del país), lo que permitirá preservar 3.000 empleos amenazados por la partida de modelos urbanos, entre los cuales se encuentra el Ford Focus.
Este es el segundo gran anuncio en una semana de Ford para crear o preservar empleos en Estados Unidos desde que Donald Trump amenazó con gravar fuertemente las importaciones mexicanas con el objetivo de obligar a los grandes constructores automovilísticos presentes en Estados Unidos a frenar sus deslocalizaciones.
La segunda compañía de vehículos estadounidense anunció la semana pasada que renunciaba a una inversión de 1.600 millones de dólares en México para inyectar casi la mitad de esta cifra en Estados Unidos y crear 700 empleos.
Donald Trump aplaudió esta decisión el lunes, y escribió en su cuenta de Twitter: “Gracias a Ford y a Fiat” Chrysler, que también anunció el domingo que repatriará a Estados Unidos la producción de una pickup de la marca Ram actualmente fabricado en México y que crearía 2.000 puestos de trabajo.
Actualmente vendida en ciertos mercados extranjeros, la Ranger debería ser nuevamente comercializada en Estados Unidos a partir de 2019.
La Bronco, en tanto, lanzada en 1966 y cuya producción estadounidense se había detenido en 1996, será vendida a partir de 2020, detalló Ford, que de paso confirmó que este año iniciará los ensayos de sus vehículos autónomos en rutas europeas, en particular en Alemania.
El grupo, que se presenta actualmente como un “especialista de la movilidad”, prueba actualmente taxis híbridos en varias ciudades estadounidenses.
