Existe una ciudad en China en donde la cantidad de mujeres sobrepasa notoriamente a la de hombres, lo que ha dado pie para que se produzca un inusual fenómeno.

Se trata de Dongguan, localidad situada en el centro de la provincia de Guangdong, en la que la enorme desproporción de género ha modificado notoriamente algunas normas sociales, como por ejemplo el hecho de que en este lugar sea normal tener tres pololas.

Algo que en Chile -y en la mayoría de los países del mundo- sería considerado una verdadera falta de respeto, en Dongguan es sumamente cotidiano y hasta bien visto.

The Daily Mail
The Daily Mail

Según consignó el periódico británico The Independent, las empresas establecidas en esta ciudad prefieren contratar a mujeres antes que hombres, ya que las consideran más confiables, lo que ha provocado que muchos de los varones tengan bastante tiempo ocioso.

De hecho, un habitante de la localidad señaló al citado medio que tener una sola pareja es considerado como “vergonzoso”, mientras que otra persona aseguró a la televisión local que en esta ciudad “es más fácil tener una novia que conseguir un trabajo”.

De acuerdo a lo publicado por el periódico News, Li Bin, quién trabaja en una fábrica, señaló: “Tengo tres novias, y todas ellas se conocen. Muchos de mis amigos también tienen varias novias”.

Dongguan, considerada como la capital del turismo sexual en China, tiene una tasa de 89 hombres por cada 100 mujeres.

La difícil situación que enfrentan las mujeres solteras en China

Si bien en la cultura occidental aún existen prejuicios asociados a las mujeres solteras que pasaron los 30 ó 40 años, en China la situación es aún más grave y atormenta a quienes la viven.

Con tan sólo 25 años, una mujer china que no haya contraído matrimonio se convierte socialmente en una “mujer sobrante” (sheng nu). En otras palabras, se transforma en alguien que “no sirve” y que deshonró a sus padres al no seguir la tradición.

Es por ello que el país oriental inventó un “mercado de matrimonio” en donde los papás publican todos los datos de sus hijos (trabajo, sueldo, edad; etc) con objeto de encontrar una pareja antes de que “se les pase el tren”.

En esta misma línea, la lujosa marca de cosméticos SK-II creó una campaña publicitaria en donde explica a la sociedad china que una mujer no necesita casarse para ser feliz y tampoco está obligada a hacerlo tan joven.