“No quiero volver a verme en esas imágenes atroces. Y menos que mis hijos me vean así”. Son las palabras de Carla Ballero, quien en una entrevista publicada este miércoles ha confirmado el inicio de una terapia, luego de la segunda detención por hurto en un mall de Santiago.

La escena, donde se le ve esposada en un control de detención, recorrió todos los canales de televisión y hasta el día de hoy se siguen repitiendo. Por lo mismo, Ballero prohibió que en su casa se vea cualquier canal nacional, evitando así que tanto ella como su familia la vean en el estado en que fue registrada.

La determinación viene de la mano con una nueva terapia, que comenzó con un panelista recurrente de La Mañana de Chilevisión, el sicoanalista Alex Droppelmann. “Retomé mis terapias, pero cambié de siquiatra”, confirmó Ballero al diario Las Últimas Noticias.

“Él salió hablando de mí en la tele (el viernes pasado en el matinal de CHV). Mi hermana lo vio y lo contactó. Él le devolvió al tiro el llamado y después nos contactaron. Decidimos que es un super buen sicoterapeuta”, indicó la hermana de Álvaro Ballero.

Fue justamente el comentario que hizo de ella, lo que hizo que fuera contactado por la familia de Carla. “Mi hermana dijo que habló de mí como si conociera mi situación. Y en la primera sesión me aclaró por qué tengo este impulso de robar. Fue súper claro y me hizo mucho sentido con lo que estoy viviendo. Me encantó”, aseguró.

El análisis

Fue el viernes pasado cuando Droppelman analizó el caso junto a Rafael Araneda y Carola de Moras en La Mañana de CHV. Allí –recoge LUN– aseguró que Carla había perdido “un lugar en la fama”.

“Ha perdido incluso belleza, gracialidad, salud mental. Ha perdido muchas cosas y en esto de perder muchas cosas, se angustia, y al angustiarse ella intenta en una repetición inconsciente ir a robar”, explicó.

A juicio del especialista, el robar lo que dice es que está pidiendo ayuda. “Lo está haciendo sintomáticamente y está diciendo: estoy destruida, destructurada, no sé que hacer con mi vida (…) Ella está pidiendo ayuda a gritos”.

En el análisis, indicó que “hay una situación matrimonial que no podemos obviar y de la que ella no se ha podido mover (…) Pienso que probablemente acá se produzca lo que se produce a veces en las parejas: unas relaciones notablemente destructivas donde una de las partes toma posición sádica y la otra, posición masoquista”.

Ballero, consultada sobre el supuesto quiebre que señaló en Bienvenidos el periodista Hugo Valencia, comentó: “no desmiento ni confirmo nada. No voy a decir nada al respecto”.

La terapia con Droppelman, sicólogo clínico y educativo, miembros de la Asociación Analysse Freudienne de París, será una vez por semana. En tanto, Ballero dejó de tomar dos medicamentos, con las ganas de enterrar los últimos episodios de su vida y recuperarse completamente.