La mayoría de las estrellas de Hollywood se esfuerzan al máximo por cuidar su peso, llegando a realizar dietas irresponsables y peligrosas. Sin embargo, Rebel Wilson optó por un camino muy diferente.
La actriz de Pitch Perfect descubrió que su mejor camino al éxito era continuar siendo “la gordita simpática”, por lo que decidió aumentar su peso para ser más graciosa.
En una entrevista con The Sunday Telegraph, Wilson de 36 años confesó se dio cuenta que una actriz de comedia con más sobrepeso que ella, conseguía ser mucho más divertida y por ende más exitosa.
“Recuerdo que pensé: ‘Seguro es porque es más gordita’, y luego, no sé si con plena conciencia, me pregunté: ‘¿Cómo puedo ser más graciosa? tal vez si fuese un poco más gorda’. Y de repente engordé, y estoy haciendo comedia”, comentó la artista que llegó a pesar más de 130 kilos.
Sin embargo, su peso tiene relación con un desequilibrio hormonal que sufre desde hace años y no con algún problema alimenticio especifico. De hecho, en el último tiempo ha perdido varios kilos por un tema de salud, aunque nunca se acomplejó por ello.
“Pienso que mi talla es una ventaja, mientras que tantas mujeres lo ven como una desventaja”, agregó.
La actriz tiene tan claro cómo funciona Hollywood, que hace algunos años concedió una entrevista al portal australiano dailylife.com.au, donde explicó su punto de vista.
“A las chicas gordas les va mejor en la comedia. Yo creo que es difícil reírte de alguien que es muy atractivo. Además esa gente no suele tener mucha personalidad”, apuntó.
