La noche del jueves se emitió un nuevo capítulo de Vértigo, estelar de Canal 13 donde uno de los invitados fue el humorista Juan Pablo López, quien tuvo mucho éxito durante su paso por el Festival de Viña del Mar en febrero pasado.
Lamentablemente, ese éxito no se repitió en este programa de televisión, pues su rutina no generó tantas risas como se hubiese esperado.
En el estudio se notaba un ambiente un poco incómodo cuando contó las primeras bromas, debido al tema. En Twitter, los usuarios no fueron tan discretos y lo destruyeron, calificándolo en su mayoría de “fome”.
¿Y por qué? Principalmente se debió a que en la primera parte de su corta presentación, se burló de las personas que padecen enfermedades mentales como la depresión y el trastorno bipolar.
La rutina la comenzó cuando Martín Cárcamo le preguntó sobre el Censo. En ese momento, Juan Pablo se paró y comenzó a relatar “me censaron ayer (miércoles) y efectivamente yo creo que hay un dato importante que hace falta en el Censo. Yo creo que gran mayoría de las personas como que está desgastada mentalmente, como que está triste. El otro día leí un reportaje que (decía que) cada cinco chilenos, hay uno depresivo. O sea, en este estudio, de los que estamos acá, hay uno depresivo (risas)”.
Luego, añadió “en mi casa era al revés, cada cinco depresivos, había uno normal. Ese era yo. Eran todos depresivos: mi mamá, mi papá, mis hermanos. Mi mamá despertaba a las tres de la mañana con crisis de pánico. Yo corría asustado a la pieza. ‘¿Mamá, qué te pasa?’ Y gritaba ella ‘¡Me voy a morir, me voy a morir!’. ‘Mamá, no te vas a morir (…) Porque llevas 20 años diciendo la misma huevá y todavía no te mueres. Apréndele a mi padre, un tipo bajo perfil, que cumplió con su promesa y ahora está descansando en paz…"”.
Cuando terminó de contar el “chiste” y casi nadie se rió, preguntó “¿me puse huevón?”.
Pese a ello, insistió con el tema, indicando que “mi papá aparte de ser depresivo, era bipolar. Un día me pegaba una cachetada y después me compraba un helado. Era cuático. Un día me pegó tan fuerte, que yo dije ‘oh el manso helado que me va a comprar mi papá"”.
En ese sentido, agregó que “yo creo que en este país es fácil tener depresión, porque uno quiere salir adelante, se esfuerza. Muchos estudiamos una carrera, pero cuando entramos a trabajar, la realidad es otra. Como que al final siempre terminamos vendiendo joyas de acero quirúrgico en la oficina, comprando mercadería con cheque restorán, vendiendo queque a $300, sacando crédito en la caja de compensación”.
“Nos frustramos, nos deprimimos, vamos al psiquiatra, el psiquiatra nos da pastillas. Ustedes no saben la cantidad de pastillas que ha tomado mi mamá por culpa del psiquiatra. Mi mamá se ha metido tanta droga en el cuerpo, que podría trabajar de burrera la vieja, de verdad (…) Mi mamá está puro leseando, debería trabajar para los narcos, repartiendo ovoides por el mundo, tendría cualquier kilómetro Lanpass a esta altura”, continuó.
En ese punto, dejó el tema de los trastornos mentales y empezó a contar chistes sobre las mujeres independientes económicamente, que “ni cagando te planchan la camisa”, y sobre los hombres “que comen pan pita” y que se dejan intimidar por sus esposas.
Todo esto no le sentó bien a los usuarios en Twitter, quienes -en su mayoría- criticaron duramente al humorista. A continuación puedes ver algunos de sus comentarios:
Polémica con Checho Hirane en el Festival de Viña
Antes de realizar su rutina humorística, a Juan Pablo López le tocó responder una pregunta “del pueblo”, que en su caso vino de parte del también comediante Checho Hirane.
Éste le dijo a López que se burló en exceso de él durante su presentación en el Festival de Viña del Mar, en febrero pasado, y le preguntó si “¿esperabas que me picara y que reaccionara en forma negativa?”.
Como respuesta, Juan Pablo aseguró que “cuando yo escribo un libreto, no me cuestiono quién se enoja y quién no (…) Es que Checho Hirane de hace tiempo que ya no hace reír (risas). Son bromas, son bromas. Me gusta Checho Hirane, ¿sabes por qué? Porque se lo tomó con humor, con humildad. Yo creo que se unió a la polémica, a diferencia de Alberto Plaza, que generó polémica, pero con descalificaciones”.
También señaló que “obviamente hay lugares donde te pueden censurar y obviamente uno no puede decir las cosas que uno tenía pensado decir. Pero cuando uno escribe, es libre, uno escribe lo que quiera. Cuando uno presenta en los bares, uno presenta lo que quiera”.
