A finales de los 90, Valentina Pollarolo (43) era uno de los rostros frecuentes de las teleseries. La actriz participó en varias producciones de TVN como Estúpido Cupido, Rompecorazón y Sucupira, antes de emigrar a Canal 13 donde consiguió el papel por el que seria recordada durante mucho tiempo.
La artista dio vida a Paola Cárcamo en Playa Salvaje, rol que continuó personificando en la sitcom Los Cárcamos. Después de eso siguió trabajando en teleseries del ex canal católico hasta que en 2002 decidió retirarse de la televisión. En este tiempo se dedicó a la locución, prestando su voz para spots publicitarios.
El año pasado, sin embargo, mostró una nueva faceta al convertirse en una de las guionistas de Preciosas. “Escribo escenas que me gustaría actuar. Es como un lujito”, aseguró la actriz a LUN.
Actualmente continua ejerciendo como guionista en Un diablo con ángel de TVN, la cual está consiguiendo muy buenos resultados. “Es una teleserie que toca temas de contingencia, pero con el filtro de la comedia. Eso ayuda a que la gente se acerque a temas que quizás serían incómodos de mirar: como muerte, las relaciones y no ver las necesidades del otro, que es lo que le pasa al protagonista. Es una comedia con ironía y mucha critica”, explicó.
Tras el estreno de la producción, las redes sociales no dejaron de bromear con que Benjamín Vicuña se estaba interpretando a si mismo, pero según Pollarolo cuando escribieron el personaje no sabían que el actor protagonizaría la historia. “Es un esteriotipo de lo que la gente puede creer que es la vida de una persona. Es parte de la fantasía del público y del personaje que construyen los medios“, aseguró
